¿Qué dice la Biblia que es la raíz de todos los males es el amor al dinero?
10 Porque el aamor al bdinero es la raíz de todos los males, el cual, ccodiciando algunos, se dextraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.
¿Qué dice Eclesiastes 5 10?
10 El que ama el adinero no se saciará de dinero, y el que ama el mucho tener no sacará fruto. También esto es vanidad. 11 Cuando los bienes aumentan, también aumentan los que los consumen. ¿Qué beneficio, pues, tendrá su dueño aparte de verlos con sus ojos?
¿Qué dice Pablo sobre el dinero?
Además, nos recuerda que el dinero en sí mismo no es malo, es un simple “medio de intercambio”. Dice que lo que es un problema es “el amor al dinero”, según Pablo apunta en 1 Timoteo 6:10 (“La raíz de todos los males es el amor al dinero”). No podremos tomar decisiones racional acerca del dinero si lo amamos.
¿Dónde habla la Biblia del dinero?
El primer gran principio respecto al dinero y a los bienes materiales que se lee en la Biblia es que Dios es el dueño de todo, del mundo y de todo lo que hay en él, “Mía es la plata, y mío es el oro” (Hageo 2:8). “De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan” (Salmo 24:1).
¿Cuál es la raíz de todos los males según la Biblia?
En fin, como dice 1 Timoteo 6:10 “porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.” El Señor no quiere que estemos atados a nada en esta tierra.
¿Cuál era la raíz de todos los males?
La Biblia dice que «la raíz de todos los males es el amor al dinero» (1 Ti 6:10).
¿Cuando Dios hace promesa no tardes en cumplirla?
Eclesiastés 5:4-5 Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas…
¿Qué es la pobreza para Jesús?
Esa pobreza ‘espiritual’ es una creciente humildad ante Dios y los demás. Pasa de un mundo ‘centrado en mí’ a un mundo centrado en Dios; un mundo en el que el servicio a los demás es prioritario. En ese sentido, la ‘pobreza espiritual’ es la capacidad de amar con una libertad radical y subversiva.