Tabla de contenido
¿Qué es cardo mariano y para qué sirve?
El cardo mariano es una planta cuyos frutos y semillas se han utilizado durante más de dos mil años como tratamiento de los trastornos del hígado y el conducto biliar.
¿Qué beneficios tiene el cardo mariano para el hígado?
El cardo mariano es una planta medicinal que pertenece al género silybum. Se usan solamente sus semillas. Su compuesto, silimarina, es capaz de proteger al hígado y regenerarlo. También ayuda a reducir gases y flatulencias.
¿Quién no puede tomar cardo mariano?
Pacientes con hipertensión, que no deben consumir esta planta pues podría empeorar esta condición. Quienes sufran de obstrucciones en las vías biliares tampoco deberán ingerir esta planta. Personas que consuman medicamentos para tratar la depresión, pues podría interferir con su funcionamiento.
¿Cómo tomar el cardo mariano para el hígado?
Adultos: tomar 2 o 3 cápsulas en la comida y en la cena con un vaso de agua. Este medicamento se utiliza vía oral. El tratamiento recomendado es de 14 días, no obstante, si usted observa que en un plazo de 7 días sus síntomas no mejoran o empeoran, deberá consultar a su farmacéutico o médico.
¿Qué efectos secundarios tiene el cardo mariano?
El cardo mariano puede causar una reacción alérgica, incluso una reacción alérgica grave que puede poner en riesgo la vida (anafilaxia)….El cardo mariano puede causar:
- Trastornos gastrointestinales, como diarrea, estreñimiento, náuseas, vómitos y distensión abdominal.
- Picazón.
- Dolor de cabeza.
¿Qué es mejor para el hígado la alcachofa o el cardo mariano?
Para preservar su función, el cardo mariano es una planta de la cual se extrae la silimarina para regular su funcionamiento, mientras que el consumo de alcachofa favorece la eliminación de líquidos y contribuye a la producción normal de bilis en el hígado, esencial en la digestión de las grasas.
¿Cuántas veces al día se toma el cardo mariano?
Las dosis para daños hepáticos agudos deben contener un mínimo de 400 mg de silymarina diarios para tratamientos de seis meses. Traducido a cápsulas de 300 mg, supone dosis de tres a seis unidades al día, ingeridas con mucha agua, al menos 50 ml. Debe figurar el porcentaje de silymarina en el producto.