¿Qué pasa si me pongo alcohol en un tatuaje?
Con el consumo de alcohol la sangre se diluye y, por lo tanto, es mucho más difícil que la tinta penetre en la piel (y eso es algo necesario a la hora de tatuar). Además, la capacidad de curación del cuerpo se ve disminuida y tu mentalidad no será la adecuada.
¿Qué se usa para limpiar el tatuaje?
Lava toda la zona del tatuaje con agua tibia y jabón con pH neutro. Seca la piel tatuada con papel absorbente de cocina. Aplica una capa muy fina de pomada para tatuajes y deja que se ventile unos minutos o, si estás tranquilamente en casa, puedes dejarlo incluso una hora, sobre todo si estás en época de calor.
¿Qué puedo tomar para que no me duela el tatuaje?
Beber abundante agua y líquidos puede ayudarte también a reducir el dolor de un tatuaje, y es que ante una situación de mucho dolor, es normal que el cuerpo reaccione y sude en exceso. Esto hará que el cuerpo pierda una mayor cantidad de agua, por lo que es esencial que esté bien hidratado.
¿Cómo se sabe si un tatuaje está curado?
Después de aproximadamente 3 semanas, las costras deberían haberse caído por completo y una fina capa de piel debería haber aparecido sobre el tatuaje. Esta capa de piel se llama «piel plateada» y hará que el tatuaje se vea sin brillo. El brillo volverá a tiempo una vez que el tatuaje esté completamente curado.
¿Por qué hacer un tatuaje con alcohol?
Hacerse un tatuaje es motivo para celebrar. Sin embargo, el consumo de alcohol puede convertir una pieza de arte permanente en un grave atentado a tu salud. Los tatuajes crean una herida abierta que requiere un cuidado provisional. Como la mayoría de las heridas, necesitan ser limpiadas regularmente y con cierto cuidado para evitar cicatrices.
¿Cómo limpiar un tatuaje?
Lava el tatuaje con un jabón suave, sin perfume y agua dos o tres veces al día durante entre los siguientes 7 a 10 días. Utiliza tu mano para lavar suavemente y luego seca el tatuaje suavemente con una toalla suave y limpia o una toalla de papel.
¿Cuáles son los beneficios del alcohol para la piel tatuada?
El cuerpo humano trata al alcohol como un veneno y al haber grandes concentraciones de esta sustancia en la sangre destina toda la energía posible a descomponerlo y expulsarlo. Esto puede restar nutrientes y minerales necesarios para la curación de la piel que ha sido tatuada, además de aumentar las posibilidades de infección.
¿Cómo afecta el alcohol a la cicatrización de un tatuaje?
El alcohol aumenta el flujo de sangre en la piel, por lo que la zona del tatuaje sangrará más de lo que haría normalmente. Esto hará más lenta la cicatrización y podría incluso afectar la forma y textura que el tatuaje tendrá al finalizar el proceso de curación.