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¿Cómo evoluciona un personaje en una historia?
La evolución del personaje, el cambio sufrido por el protagonista no consiste en meras modificaciones de su apariencia o de sus circunstancias personales, sino a un cambio significativo en la orientación de su vida, es decir, a un cambio expresado en relación con algún valor narrativo.
¿Cómo hacer una buena evolución de personajes?
Lo primero que tienes que tener en cuenta es que tus personajes tienen que cambiar a lo largo de la historia. Cuando esta acaba no pueden ser los mismos que cuando todo empezó, como tú no eres hoy el mismo que eras hace un tiempo. Las vivencias, incluso las anodinas experiencias cotidianas, nos hacen cambiar.
¿Cómo saber si un personaje tiene un buen desarrollo?
Un buen personaje tiene un objetivo, algo que lograr. Pues bien, cualquiera que sea el objetivo de tu personaje, asegúrate de que ha sido puesto a prueba varias veces a lo largo de la historia. Se trata de que las circunstancias pongan a prueba la determinación de tu protagonista para alcanzar aquello que desea.
¿Cuál es la diferencia entre la trama y los personajes?
Hace poco leía en un libro sobre escritura en el que se decía que la trama es la estructura de la narración, mientras que los personajes la sostienen como sólidas paredes. Sin ellos, sin unos fuertes y bien construidos, la novela se caería.
¿Qué son los personajes?
Los personajes son los seres de ficción que con sus actos ilustrarán el argumento de la historia. Esencialmente, los personajes surgen en tu mente cuando escribes del mismo modo que surgen los argumentos.
¿Cómo afecta un ajuste de la trama en una historia?
¿Cómo afecta un ajuste de la trama en una historia? Puede verse muy afectado por el establecimiento de un historia e incluso a formar parte de la historia. Es el escenario para todo lo que está por venir y aunque es un juego en el escenario, puede transportar tanto acerca de quiénes son las personas y la manera en que vivan.
¿Cómo hacer que tu protagonista se aburra?
Si los conoce de golpe, si el lector descubre toda la información de una vez, se aburrirá, porque tendrá la sensación de que ya lo conoce todo. Así que ve dándole pequeñas píldoras, muestra los objetivos de tu protagonista poco a poco. Introduce pequeños cambios en cada capítulo, apuesta por los giros argumentales.