¿Que tiene la introducción en el discurso?
1° INTRODUCCIÓN: Es el inicio del discurso, sirve para motivar la atención del público hacía las palabras del orador y para dar a conocer, brevemente, en que consistirá el tema a tratarse y los objetivos que se esperan alcanzar.
¿Cómo iniciar la introducción de un discurso?
Existen diversas maneras para introducir un discurso:
- Presentar una pregunta: “Me pregunto si pudiera yo adivinar…”, “¿por qué tanta gente está aquí…?”
- Cuente una historia: No necesariamente jocosa.
- Usar algún objeto: Que esté relacionado con la plática u objetivo del discurso, que se vea con facilidad.
¿Cómo iniciar una introducción ejemplos?
¿Cómo hacer una introducción? 17 técnicas y consejos para lograrlo
- Responde posibles preguntas del lector.
- Ten claro el tema.
- Imagina quién es tu lector ideal.
- Descubre cuál es el tono de habla de tu lector.
- Entiende el concepto de Buyer Persona.
- Ve de lo general a lo particular.
- Hazla corta pero llamativa.
¿Cómo introducir un discurso?
Este es el útlimo paso en la introducción de tu discurso antes de que comiences con el primer punto principal del cuerpo de tu discurso. Basta con mirar los puntos principales que se encuentran en el cuerpo de tu discurso (muchos discursos tienen tan sólo dos puntos principales, y como mucho cuatro a cinco).
¿Cómo hacer un buen discurso?
Como explica la experta en oratoria Brenda Barbosa en Inc., para hacer un buen discurso debemos comprender qué es un buen discurso. Y un buen ejemplo reciente es la sonada intervención de Oprah Winfrey en la gala de los Globos de Oro, tras la que los estadounidenses se volvieron locos pidiendo que se presentara a presidenta.
¿Cuáles son las partes de un discurso?
Generalmente, un discurso se estructura en tres partes: la introducción, el desarrollo y la conclusión, tal y como se puede observar en la Figura 2. Se exponen las ideas, los contenidos y la información de manera clara y estructurada; es decir, con coherencia y cohesionadas entre sí. ¿Qué es el discurso y qué tipos hay?
¿Cómo saber si un discurso es adecuado para pronunciarse?
Una regla de oro consiste en usar siempre frases tirando a cortas, pues es la mejor forma de no resultar farragoso y no trabarse. Pero, en cualquier caso, la única forma de saber que realmente el discurso es adecuado para pronunciarse es leerlo en alto mientras lo escribimos.