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¿Qué es la regulación de la actividad enzimática?
En la regulación de la actividad enzimática participan sustancias que actúan como inhibidores, los cuales reducen la velocidad de las reacciones catalizadas. Hay inhibidores naturales que regulan el metabolismo y otros artificiales que permiten tratar enfermedades o eliminar bacterias patógenas.
¿Cuáles son las aplicaciones de las enzimas?
En la actualidad y gracias a los avances en distintos campos de la ciencia, las enzimas se utilizan en aplicaciones tradicionales, como la industria alimentaria, comida para ganado, detergentes, textiles y curtiduría, y también en otras áreas que incluyen a la farmacéutica, la de diagnóstico y la química fina.
¿Cómo controlar la concentración de enzima?
Control de la concentración de enzima Las necesidades metabólicas pueden requerir cambios en la actividad de alguna enzima en particular. Una de las formas más obvias en que esto puede conseguirse es cambiando la concentración de enzima. Así, la necesidad de una mayor actividad enzimática encontraría respuesta a través de una mayor velocidad
¿Cómo afectan las enzimas metabólicas clave a la actividad enzimática?
Inhibición por retroalimentación. Las enzimas metabólicas clave suelen inhibirse por el producto final de la vía que controlan (inhibición por retroalimentación). En el resto de este artículo, analizaremos estos factores uno por uno, y veremos cómo cada uno puede afectar la actividad enzimática.
¿Por qué es importante aumentar la actividad de las enzimas?
Esta actividad, sin embargo, no es siempre la misma. En un momento dado, por ejemplo, puede interesar aumentar la síntesis de un determinado producto, y en otro, metabolizar un sustrato que acaba de aparecer, por lo que se deberá aumentar la actividad de las enzimas implicadas en uno u otro proceso.
¿Por qué las enzimas pierden su actividad?
Traspasados estos valores, la enzima se desnaturaliza y pierde su actividad. Dentro de estos límites existe, como en el caso de la temperatura, un valor determinado del pH, en el que la enzima desarrolla su actividad máxima, valor al que se le da el nombre de pH óptimo, y que varía de unas enzimas a otras.